Caqui, tu aliado invernal para la acidez

Introducir frutas en tu dieta siempre es una buena opción, ¡y mucho mejor si son de temporada! Pero debes saber que no todas las frutas son adecuadas si quieres evitar la acidez y el ardor de estómago, por lo que es importante conocer cuáles son las más recomendadas: el plátano, la piña o la papaya, por ejemplo, te ayudarán a combatir la acidez, pero, hoy, nuestro protagonista es una fruta quizá algo menos común, el caqui.

Se trata de una fruta de sabor muy dulce, con un contenido de agua del 80%, además de hidratos de carbono y múltiples vitaminas, y con una baja proporción de proteínas y grasas. Su temporada oscila entre los meses de octubre a diciembre, aunque algunas variedades pueden encontrarse en enero y septiembre.

El caqui destaca también por su contenido en betacaroteno, que se acaba transformando en vitamina A en nuestro organismo, la cual aporta beneficios como el mantenimiento de un buen estado de salud de los huesos o el correcto funcionamiento del sistema inmunitario, entre otros. Así mismo, gracias a su vitamina C, contribuye a la formación de colágeno y nos hace más resistentes ante las infecciones.

Además, por su contenido en magnesio, calcio, sodio y potasio, los caquis son muy alcalinizantes, lo que los convierte en la opción ideal para tener una buena digestión y hacer frente a la acidez. Al mismo tiempo, su fibra ayuda a reducir los niveles de colesterol. Como ves, todo son ventajas. 🙂

Si ya te hemos convencido, debes saber que la manera más común de tomar esta fruta es en su forma natural, cuando el caqui tenga un aspecto maduro. Así se obtiene una pulpa dulce y con una consistencia muy blanda. Otra forma de consumirlo, no tan común, es desecado, de esta manera pueden hacerse pudines o mermeladas.

Ahora que ya sabes todos los beneficios del caqui, ¿lo vas a añadir en tu dieta? 😉